En la zona de incubación tenemos una temperatura constante para el perfecto desarrollo de las crías. Trasladamos los huevos a la zona de incubación diariamente. Disponemos de un gran número de incubadoras y nos preocupamos mucho para que nazcan en perfectas condiciones.
Los huevos de perdiz se caracterizan por un fondo amarillento rojizo, salpicados de pequeñas manchas de color marrón oscuro y son de gran consistencia. También se puede decir que tienen unas dimensiones considerables si se tiene en cuenta el tamaño de la perdiz roja.